lunes, 18 de agosto de 2014

Extraído de Religión en Libertad
Los cristianos de Irak construyen una enorme Virgen María y se encomiendan a ella como protectora.
Los cristianos de Erbil han construido una imagen de la Virgen, situada a quince metros, y que fue inaugurada el día de la Asunción. Ahora ella desde la altura les protege y les anima a seguir adelante.


Los cristianos están experimentando el martirio y el exilio en Irak. Miles de ellos han perdido todo e incluso algunos han muerto a manos de los terroristas del Estado Islámico por ser cristianos y por negarse a renegar de su fe. Estos mártires están sembrando una tierra que ha albergado a los cristianos desde hace casi dos milenios.
 
Aún presas del miedo por todo lo que están viviendo durante estos meses los cristianos iraquíes no pierden la fe, es más, la persecución los afianza en todo aquello que creen. Lo fácil para ellos hubiera sido abrazar el islam aunque en su interior siguieran siendo cristianos. Pero han elegido pasar por la puerta estrecha, a sabiendas de que ello les acarrearía numerosos sufrimientos.

Su gran aliada
Sin embargo, estos perseguidos tienen un gran aliado a su favor y aunque siempre presente ahora se hace si cabe más visible. Y es que los cristianos iraquíes se han encomendado a la Virgen María como protectora y consoladora de tantos miles de afligidos que lo han perdido todo.
 
Y no sólo se han encomendado de manera espiritual sino que lo han llevado a la práctica lanzando un mensaje muy claro a los terroristas del Estado Islámico, pues tienen una gran intercesora.
 
En este sentido, durante la fiesta de la Asunción en la ciudad kurda de Erbil, principal objetivo del Estado Islámico, los cristianos la celebraron desvelando una enorme Virgen María situada sobre una columna a una altura de quince metros. Para que vea, para que proteja a los cristianos y para que sepan que allí están ellos.
 
A escasos kilómetros del frente, la Virgen ha dado ánimo a una comunidad cansada y aterrada y sirve ahora como una fuente de esperanza. Una imagen que además gira sobre sí misma para poder mirar a todas las direcciones para hacer presente que ella está en todas partes y que no abandona a sus hijos.
 
El proyecto llevaba planeado mucho tiempo y justamente se ha podido inaugurar cuando la situación es más extrema. Un cristiano local dice que “ahora todo el mundo sabe que este es un país cristiano”.

Inaugurada en la fiesta de la Asunción
En esta zona kurda han vivido durante generaciones miles de cristianos, cantidad que se ha multiplicado ahora con la llegada de refugiados que huyen de los islamistas.  La inauguración fue una fiesta y fue presidida por el obispo de Erbil, monseñor Bashar Warde Mate y en ellaestuvieron presentes las dos comunidades tanto los caldeos como los asirios en un signo de unidad ante la persecución.
 
Actualmente toda la zona en la que se ha colocado esta imagen protectora de la Virgen está tomada por cristianos. Hasta cien familias de refugiados están ahora instaladas entre la imagen y la iglesia de San José, relata uno de los cristianos de allí.
 
Durante la homilía, realizada en siriaco, el obispo hizo precisamente un llamamiento a seguir a María que no dudó en seguir y ayudar a un Cristo perseguido.